¿Se dice “el azúcar blanco”, “la azúcar blanca” o “el azúcar blanca”?
Etimológicamente, según la RAE (Real Academia Española) en http://lema.rae.es/drae/?val=azucar, la palabra “azúcar” deriva del árabe hispánico “assúkkar”; este, del árabe clásico “sukkar”; este, del griego “σάκχαρι” y este último del pelvi “šakar”.
Luego de ofrecer su primera definición (cuerpo sólido cristalino), el diccionario de la RAE deja claro que el género de la palabra “azúcar” es ambiguo. A continuación, se mostrarán algunas de las entradas que presenta dicha obra.
azúcar blanco, ca.
1. amb. azúcar refinada, obtenida en polvo muy tamizado.
azúcar moreno, na.
1. amb. azúcar de segunda producción, cuyo color varía desde el amarillo claro hasta el pardo oscuro, según la cantidad de mezcla que queda adherida a los cristales.
azúcar negro, gra.
1. amb. azúcar de segunda producción, cuyo color varía desde el amarillo claro hasta el pardo oscuro, según la cantidad de mezcla que queda adherida a los cristales.
Por otro lado, el DRAE (Diccionario Panhispánico de Dudas) explica que, a pesar del género ambiguo de “azúcar”, cuando este vocablo no va acompañado de ningún adjetivo que indique su naturaleza o etapa de producción, es mayoritario el uso en el género masculino, es decir, “el azúcar”. Sin embargo, al estar acompañado de un adjetivo especificativo, suele usarse el género femenino, o sea, “la azúcar blanca”. Asimismo, si esta palabra se usa en plural (con adjetivo o sin él), se prefiere el género masculino.
Entonces, los usos que se proponen son las siguientes:
a. “la azúcar morena” y hasta “el azúcar morena” ([el] + [azúcar] + [adjetivo femenino]), pero también “el azúcar moreno”;
b. “el azúcar”, pero también “la azúcar”; y
c. “los azúcares” (rara vez en femenino).
Si desea leer más sobre este tema, consulte http://lema.rae.es/dpd/?key=az%C3%BAcar.